Yo quiero ir al insti

Siempre he pensado que el que no ha querido estudiar no ha estudiado, ni por muchos esfuerzos paternos y otras insistencias.

Ahora Chaves propone un sueldo de 600 euros mensuales para que los jóvenes andaluces que no quieran estudiar vayan a calentar la silla.

No creo que con dinero se pueda inculcar a una persona el valor del estudio (si es que lo tiene). Si no quieres estudiar no estudiarás, es así de simple. Pero con la medida, seguro que más de alguno se lo toma como un trabajo liviano, y es que al fin y a la postre veinte mil duros de los de antes y viviendo con tus padres dan para unos fines de semanas tremendos y llenos de caprichos.

Igual Chaves mata dos pájaros de un tiro y también termina con el botellón, porque con este sueldecito bien se puede pedir un buen mojito en el local de moda.

Considero que la propuesta llenaría las aulas de adolescentes conflictivos que lastrarían el proceso educativo y el funcionamiento del instituto.

Mamá, preparame el almuerzo que me voy al trabajo, y es que yo quiero volver al instituto.